Al escribir en 1939-40, Trotsky responde a elementos dentro del movimiento obrero revolucionario que se replegaban de la defensa de la Unión Soviética ante el ataque imperialista que se cernía. Explica por qué solo un partido que luche por integrar a números crecientes de trabajadores a sus filas y a su dirección puede mantener un firme curso revolucionario.
Prefacio a la cuarta edición por Doug Jenness, introducción a la segunda edición por George Novack y Joseph Hansen, glosario, notas, índice.
Apendices por James Burnham: Ciencia y estilo: Una respuesta al camarada Trotsky, Carta de renuncia al Partido Obrero.
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